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Crear un Ministerio para el fomento del silencio y el control del ruido. ¿Utopía o necesidad?

Uno se plantea a veces la necesidad de una reeducación de la gente. Seriamente. No es por nada, sino por el mero hecho que estamos perdiendo todo decoro y formas a la hora de vivir en sociedad. Sólo por eso. Ya es bastante complicado que uno se implique en el bien común, pues no lo entendemos, más que desde el bien de uno mismo. Vivir en sociedad, comunidad significa cultivar el bien común para obtener el propio. Pues no, todavía no se entiende. Y si alguna vez se entendió, ahora desde luego, está en el olvido.

Paseas por la calle y la gente parece que viene hacia ti como en bloque para golpearte al cruzarse contigo. No ceden ni unos milímetros para que haya lugar para ambos cuerpos en esa calle estrecha y concurrida. No. Ellos tienen prioridad por que sí. Quieres ser un buen ciudadano y no colapsar con tu vehículo propio mas el aire sucio que respiramos, te animas a tomar el transporte público, y BOM! ¿Qué ocurre? Te contaminas de otro mal de esta sociedad; El Ruido excesivo de la mala educación entre otros... Como si estuvieras en la mente de un esquizofrénico, oyes múltiples voces y músicas (horribles en la mayoría de los casos) conversaciones ajenas y estúpidas sin parar, los malditos móviles, que han venido para que los más idiotas tengan siempre con quien hablar, aunque no se estén comunicando realmente. Conversaciones y más conversaciones absurdas en los mensajes de voz de esta o aquella red social. Todo tipo de gente mirando sin auriculares videos ruidosos. Antes se podía ir leyendo un libro o un periódico, ahora, ¡olvídate! Mejor que te pongas uno de esos auriculares que usan los obreros anti ruido para taladrar aceras. La gente cada vez te impone más su vida (a veces realmente es absurdo) de m****. Antes era más bien lo contrario, hablábamos bajito cuando había más gente para que no oyeran nuestros problemas o nuestra conversación, ahora más bien, la idea es que «me oigan». Al final uno estresado decide al llegar al destino tomar un té o café en algún lugar, BOM! otra vez. Gente hablando a voces, con otros o con sus móviles. Es un no parar, constantemente de escuchar gente sola o acompañada gritando y gritando ….

Las ciudades cada vez son más hostiles. No estamos construyendo un lugar para todos, los más molestos se están imponiendo ante los más discretos. Quizá no sean muchos los perturbadores, pero se les oye mucho. No hay sitio donde uno puede estar a gusto y tranquilo. El ruido lo invade todo de forma brutal. Madrid es una de las ciudades más ruidosas de Europa concretamente la 4ª, a continuación está Barcelona. Las tres que encabezan el ranking del ruido son: París, Londres y Roma. El tema es el que venimos contando aquí, la falta de respeto por el otro, miramos únicamente nuestro ombligo y no nos damos cuenta que nuestra música, nuestra conversación a voces, está molestando a la persona que tenemos al lado que también tiene su derecho de estar ahí. Así con todo. Madrid es una ciudad que no respeta los horarios de nada en los espacios públicos. Los motores de los coches encendidos cuando están parados, los perros ladrando sin cesar por la mañana, por la tarde y por la noche. La contaminación lumínica. He de decir que ahora está mejorando un poco, gracias a la normativa europea de gasto eléctrico. Que se hace por economía y no por salud…. bueno, bienvenido sea. Todos los rankings nos dan ganadores en contaminación acústica y también en ciudad (aquí está España entera) donde no se duerme bien. Esta tendencia de no dormir o dormir mal y poco se ha incrementado en los últimos 20 años y vamos incluso empeorando. Es realmente alarmante.

Según datos de la OMS, estos efectos sobre la salud empiezan a producirse incluso por debajo de los 55 decibelios de nivel de ruido en el período diurno, vespertino y nocturno y de los 50 decibelios de nivel de ruido durante el período nocturno, que son los umbrales notificados establecidos por la Directiva sobre el ruido ambiental de la UE. Por tanto, es probable que estas cifras sean inferiores a las reales. Además, la información proporcionada por los países que se rigen por la legislación de la UE no cubre todas las zonas urbanas, carreteras, vías ferroviarias y aeropuertos, ni incluye todas las fuentes de ruido.

EEA (European Environment Agency)

El 58% de los españoles no duerme bien, y no nos extraña. Y no digamos ya los pequeños. Esto es a causa del estilo de vida que llevamos. Los niños son las víctimas colaterales, son esclavos del estilo de vida de sus padres. Sólo hay que ver las terrazas llenas de padres con niños medio dormidos en los carricoches o extremadamente activos a altas horas de la madrugada, mientras sus padres se toman unas cervezas sin darse cuenta que están generando problemas neurológicos a esos niños pequeños. No los decimos nosotros lo dicen SEN (Sociedad Española de Neurología). Se estima que 113 millones de europeos se ven afectados por una exposición a largo plazo al ruido del tráfico diurno, vespertino y nocturno de al menos 55 decibelios. Además, no únicamente son los coches aunque sí es el más significativo en cuestión de ruido, pero además hay 22 millones de europeos están expuestos a elevados niveles de ruido procedente del tráfico ferroviario, 4 millones están sometidos a elevados niveles de ruido de los aviones y menos de un millón a elevados niveles de ruido ocasionado por las industrias.

El sueño es un proceso fisiológico de vital importancia para la salud integral de los seres humanos, para la supervivencia del individuo y para el correcto funcionamiento del sistema nervioso. Si no conseguimos dormir bien se reduce la calidad de vida, aumenta el riesgo de hipertensión y, por tanto, de sufrir un accidente cerebrovascular, y se pueden agravar otras enfermedades que parezcamos. Pero además nuestras funciones cognitivas se ven afectadas: baja la concentración y la capacidad de atención, el tiempo de reacción aumenta, se pueden producir fallos de memoria, cambios bruscos de humor y alteraciones en el proceso de toma de decisiones, problemas de aprendizaje, etc. Por lo tanto, tener una buena calidad de sueño es fundamental”.

Dr. Hernando Pérez.

Es muy llamativo la hora media de ir a la cama en países europeos, en España es donde más tarde nos acostamos la media es las 24:00, en Italia sólo una hora antes esto es las 23:00, en el resto de países Alemania, Francia, Suecia por ejemplo, la hora es 22:00. Esto no significa que en nuestro país al acostarse más tarde se levantan más tarde, no. La media al madrugar son desde la 06:00 a las 08:00 de mañana, por lo tanto hay un deficit de sueño. También hemos preguntado desde que se van a acostar cuánto tiempo tardan en conciliar el sueño, muchos nos respondieron que incluso un par de horas, dado el ruido que hay tanto en la calle como en el edificio donde viven. Nos llamó la atención como había algunas personas que nos indicaban que incluso escuchaban en casa de vecinos, niños pequeños (entre 2 y 6 años) jugar, correr, llorar, gritar, hasta las 12 de la noche. También cómo algunos vecinos incluso ponía lavadoras o estaban charlando a horas nocturnas en sus balcones. Perros ladrando prácticamente toda la noche, y mucho tráfico.

Sin duda tenemos que tomarnos en serio el dormir, sobre todo el descansar bien. Los últimos informes de cómo van nuestros jóvenes en los estudios comparado con el resto del mundo nos deja en evidencia. «En España, desde 2005, se ha detectado un incremento del 57% en el consumo de benzodiacepinas. Las benzodiacepinas son los somníferos y ansiolíticos más comunes, y el desmesurado aumento ha levantado la voz de alarma en muchos sectores de la sanidad. La benzodiacepina es una droga que debe reservarse para problemas de sueño graves y siempre bajo una supervisión clínica, ya que está demostrado que el organismo humano ejerce una rápida tolerancia a dicha sustancia y, por lo tanto, la adicción a las mismas puede aparecer con gran celeridad». El consumo continuado de las benzodiacepinas puede contribuir en un 20% o incluso 50% a la aparición temprana de Alzheimer.

Para concluir el ruido, en consecuencia la falta de sueño afecta a: sistema metabólico, descanso deficiente, problemas cardiovasculares, la habilidad de aprendizaje (especialmente en los niños y jóvenes), problemas en el sistema nervioso, obesidad y un largo etc. Incluso podría tener consecuencias psicológicas graves. Debemos considerar esto por nosotros mismos, pero viendo la evolución de la tendencia a empeorar han de ser las políticas públicas desde las Instituciones y los políticos quienes deben regularlo a través de normativas. La frustración es que ya hay mucha ley al respecto, pero sintiéndolo mucho debemos decir que la policía no se lo toma muy en serio. Hemos hecho un sondeo rápido en varias zonas urbanas de Madrid y alrededores y muchos vecinos nos comentan haber llamado a la policía por vecinos molestos o perros ladrando, coches con el motor encendido parados (lo que está prohibido) gente gritando en la madrugada borracha en la calle… Y nos dicen que no ha habido ningún tipo de respuesta efectiva por parte de la policía en muchas ocasiones, en otras han sido en vano pues no han aplicado la ley. Es incomprensible. Hablando de algo personal a mi me ha sucedido recientemente, un vecino molesto constantemente casi a diario hasta las tantas y la policía me recomendó que si habiendo habiendo hablado con el susodicho (cosa que hice en múltiples ocasiones) no se soluciona, que me vengara yo con ruido también. Crudo y real. Para acabar con el ruido HAZ TÚ MÁS RUIDO. ¿Qué alternativa tienen aquellos que quieren dormir mejor contra los que imponen sus ruidos si los que tiene que velar por nuestros derechos echan balones fuera?

La foto de portada es de Helena Rubí.

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