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Teatro

En «Paella»: ¿La vida imita al teatro o es el teatro el que imita a la vida?

Tarambana teatro presenta esta comedia gastroescénica de 90 minutos en el Teatro Fernán Gómez de la Plaza de Colón en Madrid. Se podrá ver hasta el día 28 de enero.

A partir de un impulso creativo de su autor, quien además actúa, David Fernández «Fabu», en pleno confinamiento durante la pandemia, surge «Paella». Desde ahí el proceso creativo fue constante para ir perfilando este espectáculo difícil de clasificar que nos recuerda a una comedia alocada del absurdo con tintes de enredo de pareja e influjo pirandéllico, y algo de musical con un trasfondo de tema social. Es una comedia contemporánea donde además se cocina de verdad. Pero ¡cuidado! en lo absurdo se esconde la revelación más profunda. Nos evoca a ese teatro beckettiano con un mensaje enternecedor y profundo, la vida solitaria y la esperanza siempre viva y tangible. En palabras de su autor; «cuando hacemos una paella la hacemos para compartirla, rara vez este plato se come a solas, como el teatro». El teatro es un reflejo de la vida, aunque a veces parece que la vida fuera una obra teatral. La realidad supera la ficción, seguro que esa frase la decimos todos en algún momento de nuestra vida. Lo que nos pasa es porque estamos vivos. Así el teatro es la forma que imita la vida más perfecta, su forma representa la realidad social, política, psicológica entre los seres humanos. Por eso, el texto de «Paella» es un texto vivo, donde parece que se improvisa, cuando la realidad es que no. El espectador, como cuarta pared, es parte de la trama, participa del momentum. Uno podría pensar que todo es un «happening» a juzgar por la química que transpiran sus actores protagonistas, Nerea Moreno como Amparo y David Fernández «Fabu» como Federico.

La dirección corre a cargo de Víctor Velasco. La dificultad que podría radicar en dirigir un texto cuyo autor es también el actor ha sido más bien un reto que ha dado frutos muy dulces. El diálogo que puede existir entre público y actores quizá es el que realmente importe, pero la dirección ha sabido muy sabiamente construir un espacio para que este diálogo se produzca. Un autor cuando escribe un texto y lo da de alguna forma ya no le pertenece. Es algo mágico que va creciendo y toma formas inesperadas. Luego a eso se le suma un espacio escénico y un vestuario, a cargo de Laura Ordás, la música por Momo Cortés y tenemos algo vivo que ha sido influido por su entorno. Ese texto y esta puesta en escena es lo que vemos en movimiento sobre las tablas. Teatro Puro. La obra ya lleva muchas paellas, pues han representado el espectáculo en muchos lugares siempre con una gran acogida por el público, por lo que, verlos en Madrid en el Fernán Gómez es ya algo rodado y se nota. La complicidad, la química, incluso hay cierta seguridad, aunque seguro siempre hay nervios. Ambos actores están en una vorágine de movimiento constante, hay mucho ocurriendo, sin embargo, uno se relaja y se deja llevar por las palabras y olor del sofrito de la paella. Si se dice que el teatro es la verdad, desde luego en esta ocasión se huele.

Esta producción de Tarambana Teatro se estrenó en Surge Madrid, en la IX Muestra de Creación Escénica. La obra ha obtenido en el XVIII Festival de Teatro y Danza Independiente de Santander – Indifest los premios de Mejor interprete femenina, Mejor dirección y Premio del público.

A pesar de que la vida nos da en ocasiones algún pinchazo que otro, no nos queda más remedio que seguir viviendo que merece la pena con su amargor o su dulzor, estar vivo significa sentir y compartir con los que uno quiere las alegrías y las penas. The Show must go on. BGD.

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